Esta semana aprovechamos que Jorge tenía que recoger a Almudena en el aeropuerto de Ginebra para continuar aprendiendo más de la ciudad.
Es fácil darse cuenta que Ginebra es la ciudad de los relojes, yo diría que hay más tiendas de relojes que restaurantes. Algo interesante que pudimos visitar esta vez fue la catedral de San-Pedro desde la cual obtuvimos unas fantásticas vistas del casco antiguo y del lago Leman.
Hubo un momento del día que se puso a llover, pero esto no fue problema para nosotros, ese tiempo lo invertimos visitando la Fnac de 3 pisos situada en el centro de la ciudad :-)
Es fácil darse cuenta que Ginebra es la ciudad de los relojes, yo diría que hay más tiendas de relojes que restaurantes. Algo interesante que pudimos visitar esta vez fue la catedral de San-Pedro desde la cual obtuvimos unas fantásticas vistas del casco antiguo y del lago Leman.
Hubo un momento del día que se puso a llover, pero esto no fue problema para nosotros, ese tiempo lo invertimos visitando la Fnac de 3 pisos situada en el centro de la ciudad :-)
Actualización de la galería de Ginebra:
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